No es ningún secreto que me encanta recibir gente en casa, ¡y definitivamente no es ningún secreto que me encanta darles de comer! Hay algo en el hecho de dar de comer a la gente que me hace feliz…., como si realmente estuviera cuidando de ellos…., y no hay mejor cumplido que alguien se coma dos o tres raciones de lo que sea que haya preparado y se quede absolutamente lleno cuando se vaya. Pensándolo bien, todo empezó en la universidad, en cuanto tuve un apartamento. Me encantaba la idea de invitar a amigos a cenar, y en la pequeña cocina de mi apartamento probé a hacer ñoquis caseros, bruschetta, pasta y mucho más. En aquel momento, me parecía tan «adulto» …. ¡y enseguida me di cuenta de que me encantaba entretener! Cuando Ellia era pequeña, no parábamos de invitar a gente a casa: comidas, cenas, comidas al aire libre, partidos de los Packer …. y, cuando Greta era recién nacida, seguía organizando cenas semanales para amigos mientras Jorden estaba en clase. No fue hasta que llegó Nora cuando todo cambió.
Quien diga que el verdadero cambio se produce cuando tienes dos hijos, ¡está loco! Dos es pan comido (yo seguía organizando cenas semanales). Es cuando tienes tres hijos cuando tu vida da un vuelco …. ¡o al menos así fue en mi caso! Tres niños significa que alguiensiemprete necesita. Tres niños significa que la colada de otra persona se acumula en montones y montones que nunca se acaban. Tres niños significa que, en cualquier momento, uno de ellos seguramente está llorando. Y tres niños significan menos entretenimiento.
Porque ahora, cuando llega la hora de cenar, ¡lo último en lo que pensamos es en invitar a alguien! En primer lugar, la hora de la cena es un caos en nuestra casa. Alguien suele estar en el suelo, o de pie en su silla, o riendo tan fuerte que te preocupa que se pueda ahogar. En segundo lugar, la hora de cenar significa que la hora de acostarse está a la vista: ¡…. y tener a alguien en casa claramente la pospondría! (¡No es una opción!) En tercer lugar, a la hora de cenar, la idea de que quiera cuidar de una persona más (además de los 3 niños que he estado cuidando todo el día) ¡parece una auténtica locura! ¡En resumen, creo que es seguro decir que ya no recibimos gente en casa como antes…!
Pero… El hecho es que me sigue encantando tener gente en casa …. y me sigue encantando darles de comer. ¡(¡Sólo parece que no!) Es sólo que tengo que ser realista …. y si quiero disfrutar de su compañía, tengo que hacer algo que sea E-A-S-Y! Como este risotto sin revolver con verduras asadas al balsámico. Este plato es perfecto para recibir invitados (incluso con tres niños) porque es rápido y fácil ….. ¡pero impresionante! Así que todavía se puede disfrutar de su compañía, y cuidar de sus hijos, sin perder la cabeza. Lo cual no es nada fácil.
Risotto sin remover con verduras asadas al balsámico
1/2 taza de cebolla roja picada
2 cucharadas de aceite de oliva
1 1/3 c. de arroz Arborio
4 c. de agua
1 cucharadita de caldo de pollo instantáneo en gránulos
1 c. de queso parmesano rallado
8 c. de verduras frescas picadas (1 calabacín pequeño, 1 calabaza amarilla pequeña, 4 oz. de champiñones baby bella en rodajas, 1/2 berenjena mediana, 1/2 c. de cebolla roja, 1 pimiento verde) *¡Siéntete libre de sustituirlas según tus gustos!
1/8 c. de aceite de oliva
1/4 c. de vinagre balsámico
1 cucharadita de sal kosher
1. Precaliente el horno a 425 grados.
2. En una cacerola mediana calentar 2 cucharadas de aceite de oliva y cocinar 1/2 taza de cebolla roja picada hasta que esté tierna.
3. Añadir el arroz Arborio crudo; remover y cocer 2 minutos.
4. Añada el agua, los gránulos de caldo y una pizca de pimienta. Llevar a ebullición y bajar el fuego. Tapar y cocer a fuego lento 20 minutos.
5. Mientras el arroz hierve a fuego lento, esparza 8 c. de verduras frescas picadas en una bandeja para hornear grande con borde. Rocíe con 1/8 c. de aceite de oliva, 1/4 c. de vinagre balsámico y 1 cucharadita de sal kosher.
6. Asar en el horno a 425 grados durante 25 minutos, removiendo a mitad de tiempo.
7. Cuando el arroz esté listo, déjelo reposar tapado durante 5 minutos. Incorpore el queso parmesano.
8. Servir las verduras al balsámico sobre el risotto; sazonar con sal kosher adicional o vinagre balsámico al gusto.
*Receta de risotto adaptada de Better Homes and Gardens New Cook Book