Patatas para el desayuno del suroeste. Estas patatas al horno son fáciles de hacer y están asadas con pimiento, jalapeño y la mezcla perfecta de condimentos. Crujientes por fuera y blandas por dentro, ¡estas patatas son mejores que las de tu restaurante favorito!

No hay nada mejor para completar un desayuno que unas buenas patatas crujientes. Estas papas son fáciles de hacer, se hornean y salen suaves por dentro y crujientes por fuera. El acompañamiento perfecto para tus huevos revueltos, quiche, migas o tacos de desayuno.
Cómo hacer patatas de desayuno:
- Cortar las patatas y los pimientos en dados. Añada cebolla picada si lo desea. No añada ajo picado, no aguanta bien el asado a fuego fuerte. Utilice los pimientos que desee, si el jalapeño es demasiado picante, puede utilizar una mezcla de pimiento rojo y verde en su lugar.
- Rociar con aceite. Remover para asegurarse de que todas las patatas y pimientos están cubiertos, esto ayudará a protegerlos durante el proceso de asado y ayudar a crear un exterior crujiente.
- Sazonar: mis condimentos favoritos son ajo en polvo, cebolla en polvo, sal, comino, pimienta negra y pimentón ahumado.
- Hornear. Extienda las patatas en una capa uniforme en la bandeja de hornear para asegurar una cocción uniforme.
- A fuego fuerte. Cuando las patatas hayan cocido 20 minutos, aumente el fuego a 500℉ para que la piel de las patatas quede crujiente.

Consejos para hacer CRISPY patatas:
Como no vamos a freír estas patatas en una sartén, tenemos que hacer un par de cosas para que queden bien crujientes por fuera mientras se hornean.
- Cubrir con aceite – utilice un aceite con alto punto de humo (el aceite de aguacate es una gran opción)
- Cocina a 425℉ inicialmente para ayudar a ablandar las patatas.
- Cocina a 500℉ para terminar, esto dará una piel crujiente a las patatas.
Almacenamiento:
Las patatas crujientes para el desayuno son mejores si se comen inmediatamente después de hornearlas. Si le sobran, guárdelas en un recipiente hermético en el frigorífico durante 3-4 días. Al recalentarlas, para que conserven parte del crujiente, rocíe una pequeña cantidad de aceite o derrita un poco de mantequilla en una sartén a fuego medio y fría las patatas mientras se calientan.

Más recetas de desayuno:
- Quiche de huevos Benedict
- Margarita Bellini
- Chilaquiles Rojos

Ingredientes
- 1 cucharadita de sal
- ½ cucharadita de ajo en polvo
- 2 libras de patatas russet (cortadas en dados)
- 1 pimiento rojo (cortado en dados)
- ½ cucharadita de comino
- ½ cucharadita de cebolla en polvo
- 1 cucharada de aceite de aguacate
- 1 jalapeño (sin semillas ni membranas, cortado en dados)
- ¼ cucharadita de pimienta negra
- 1 cucharadita de pimentón ahumado
Instrucciones
- Precalentar el horno a 425℉.
- Limpie y corte las patatas en dados y colóquelas en un bol grande.
- Añada el pimiento rojo cortado en dados y el jalapeño cortado en dados. Rocíe con aceite. Remueva para mezclar.
- Añadir los condimentos. Remover para cubrir completamente las patatas y los pimientos.
- Extender las patatas en una bandeja de horno grande formando una capa uniforme.
- Hornear durante 20 minutos, remover con una espátula, luego subir la temperatura a 500℉ y hornear durante 15-20 minutos más, o hasta que las patatas empiecen a estar crujientes y doradas por los bordes. Remuévalas cada 10 minutos aproximadamente para asegurarse de que todos los lados estén crujientes.