Me doy cuenta de que mi serie sobre productos naturales ha sido un poco floja, pero hoy voy a compartir algo para compensarlo – una receta impresionante para una crema hidratante facial casera que adoro absolutamente. En serio, ¡es increíble!
Tengo la piel seca y sensible, así que tengo que tener cuidado con los productos que uso, sobre todo en la cara. Con esta crema casera, por fin he encontrado algo perfecto para mi tipo de piel. La uso todo el año pero es especialmente agradable en los meses de invierno ya que mi piel tiende a estar más seca de lo normal. Aunque creo que sería genial como crema hidratante diaria, no tiene SPF, así que me quedo con una crema de protección solar durante el día. Actualmente estoy usando A Perfect World SPF 25 de Origins y me está gustando.
Desde que cambié mi anterior crema hidratante de noche (CeraVe) por esta mezcla casera, he notado una gran diferencia en lo tersa y suave que está mi piel cuando me levanto por la mañana. ¡Es gloriosa! También me he dado cuenta de que la crema hidratante no es sólo para la cara – se puede utilizar en todo el cuerpo. Me la pongo en las manos, las rodillas, los pies, los codos y en cualquier otro lugar donde sienta sequedad.
Lo mejor es que la mezcla se compone únicamente de tres ingredientes naturales, que además están repletos de antioxidantes, ¡perfectos para protegerte de los radicales libres y mantener tu piel suave como la seda! También he de decir que un poco rinde mucho. Un lote suele durarme un par de meses.
Otra ventaja: huele delicioso gracias al aceite de coco y la manteca de cacao.
Crema facial casera y natural
Ingredientes
- 1 cucharada de aceite de coco
- 2½ cucharadas de manteca de cacao
- ½ cucharada de aceite de oliva virgen extra
Preparación
- Derrite primero el aceite de coco metiendo el recipiente/jarra en un recipiente con agua caliente.
- Mezclar todos los ingredientes en un cazo pequeño o al baño maría y calentar hasta que se derrita la manteca de cacao.
- Retirar del fuego.
- Deje que la mezcla se enfríe un poco, colóquela en un pequeño recipiente/jarra hermético y agítela enérgicamente, déjela reposar unos minutos y agítela de nuevo.
- Dependiendo de la temperatura, la mezcla puede solidificarse de forma similar a como lo hacen por sí solos el aceite de coco y la manteca de cacao. En invierno, la crema suele estar sólida. Solo tienes que usar el dedo para sacar un poco del tarro, frotarla en las palmas de las manos o entre los dedos para calentarla un poco y luego aplicarla.
Prepara un lote para ti y aplícatelo cada noche después de lavarte la cara. O haz una tanda para un amigo: un pequeño tarro es un estupendo regalo casero para estas fiestas.
PD – Ahora mismo estoy de camino a Florida por trabajo. No puedo esperar a que el clima 80 °!!! 🙂 .