Seguro que conoces a alguien así. Puedes distinguirlos desde la primera vez que los conoces. Es esa persona que puede recordar lo bueno y lo malo de todos y cada uno de los acontecimientos que han sucedido en su vida.
Son esos amigos que siempre recuerdan y vuelven a contar esa historia (una y otra vez) sobre aquella vez que todos fuisteis a aquella fiesta y conocisteis a aquel chico que dijo aquella cosa y os hizo reír mucho, mucho, mucho e hizo que aquella chica se meara en los pantalones.
Te acuerdas, ¿verdad?
No, no tengo. Y me parece bien.
Cuanto mayor me hago, empiezo a creer que, en cierto modo, tener una memoria a largo plazo terrible me convierte en una persona afortunada.

Ingredientes
- 2 tazas de calabaza (cortada en dados)
- 1/2 cebolla mediana (picada)
- 1 1/2 tazas de chips de tortilla (triturados gruesos)
- 1 lata de 32 onzas de caldo de pollo
- 1/4 taza de cilantro picado
- 2 latas de 15,8 onzas de alubias blancas o cannellini (enjuagadas y escurridas)
- 2 cucharaditas de aceite vegetal o de canola
- 1/2 taza de queso Monterrey jack
- 1/4 taza de chiles hatch asados (o 1 lata de 4 onzas de chiles verdes picados)
- 1 libra de pechugas de pollo sin piel (deshuesadas, cortadas en trozos del tamaño de un bocado)
Instrucciones
- Calentar el aceite en un horno holandés grande a fuego medio-alto. Añadir el pollo y cocinar hasta que se dore, removiendo con frecuencia. Añadir la cebolla y cocinar durante 3-5 minutos o hasta que se ablande. Añada la calabaza, los frijoles, los chiles y el caldo de pollo. Añada los totopos, lleve a ebullición y, a continuación, reduzca el fuego y deje cocer a fuego lento sin tapar durante 10 minutos o hasta que la calabaza esté tierna y el pollo completamente cocido.
- Servir en tazones y espolvorear con queso Monterrey jack y cilantro. Servir con chips de tortilla al lado.