Aleluya y saquen las panderetas. Es el Mes Nacional del Queso a la Parrilla.
Queso a la plancha. Una brillante elección de quienquiera que sea el designador del evento del mes. ¿No sería una tarea increíble? ¿Decidir qué es digno de un mes entero de celebración? Envidia del trabajo. Como el tipo que elige los nombres de los colores de pintura de las paredes.
Un mes entero para decir que está bien y es perfectamente razonable comer queso a la plancha todos los días.
Descubrí el Mes del Queso a la Parrilla gracias a Clementine Bakery, en el oeste de Los Ángeles. Cada abril celebran los 30 días con 15 especiales de queso a la parrilla que te hacen decir: «Vaya, tengo que conseguirme un poco de eso».
Desde el Philly Cheespaocalypse hasta la crisis del sándwich cubano, estos fabricantes de sándwiches saben cómo darle un giro al tradicional queso a la plancha.
Durante el mes de abril compartiré mi oda al gran queso a la plancha. Cada semana presentaré una recopilación de quesos: pura delicia para derretir entre dorados trozos de pan tostado. La primera semana empieza ahora.

Ingredientes
- 12-15 uvas rojas sin pepitas
- sal y pimienta
- 1 taza de hojas de rúcula
- 8 rebanadas de pan de masa madre
- 2 tazas de queso cheddar blanco (rallado)
- 1 cucharada de aceite vegetal
- 1 libra de fiambre de pavo (desmenuzado)
- 1 cebolla pequeña (en rodajas)
- 1 cucharada de salvia (en tiras)
- 3 cucharadas de mantequilla
Instrucciones
- En una sartén mediana, derretir 1 cucharada de mantequilla y aceite vegetal a fuego medio. Añadir la cebolla y saltear durante 10 minutos, removiendo de vez en cuando, hasta que esté semitransparente y caramelizada. Añadir las uvas y saltear 5 minutos más. Añadir la salvia y retirar del fuego.
- Calentar una sartén a fuego medio. Unta con mantequilla un lado de cada rebanada de pan. En el lado no untado de mantequilla de 4 rebanadas de pan, pon 1/4 de taza de queso, cebolla y uvas, 1/4 de porción de pavo, 1/4 de porción de hojas de rúcula y 1/4 de taza más de queso. Coloca la rebanada de pan encima, con la cara untada con mantequilla hacia arriba, y gratina en la sartén hasta que el pan se dore. Dale la vuelta al sándwich una vez y cocina hasta que el queso se derrita y el pan se dore. Cortar por la mitad y servir caliente.